El pasado Sábado del Libro, como habíamos anunciado, estuvo dedicado a la presentación del volumen En los umbrales de la Revolución. Terrorismo y bandidismo en Occidente (1959-1965), de José Suárez Amador, publicado por la editorial Nuevo Milenio, en su sello Ciencias Sociales.
El Comandante Víctor Dreke, jefe de operaciones de la Lucha Contra Bandidos (LCB) en el Escambray, segundo jefe de esta dentro del Ejército Central, y presidente de la Asociación de Combatientes en La Habana, tuvo a su cargo la presentación de este texto y de su autor dijo: «No escribe por gusto, no escribe mentiras, (…) por eso este libro es tan importante».
José Suárez Amador (La Habana, 1939), une a su experiencia como combatiente en la LCB durante 50 meses, una amplia investigación con la cual completa una trilogía sobre el tema que en dos textos anteriores revisa los sucesos acecidos en otras regiones del país: Terrorismo en el Centro y Combatiendo el bandidismo desde Las Villas a Oriente. Dreke aseguró: «Con este libro se completa la narración épica de una etapa histórica de enfrentamiento a los enemigos de la Revolución que trataron de impedir el desarrollo de esta».
Y finalizó sus palabras considerando:
«Este libro es muy oportuno para leerlo, estudiarlo, tenerlo como referencia. El mejor homenaje que se puede hacer a la memoria del jefe que luchó contra todos los bandidos, que creó Los Malagones, el Comandante Fidel Castro, es ser fiel a la verdad, escribir la verdad; pedacitos de verdad hacen verdades; pedacitos de mentiras no hacen verdades y este libro es un pedazo grande de la verdad de lo que pasó en Occidente cuando la LCB».
El autor por su parte comentó que a pesar de que el tema de la LCB ha sido ampliamente tratado por los diferentes géneros literarios, por el cine y el teatro también, quedan muchos aspectos que aún deben estudiarse de la épica gesta histórica que se desarrolló en todo el territorio nacional.
A continuación explicó el contenido y estructura del libro, relató muchas de sus experiencias en cuanto a los alzamientos armados, y recordó anécdotas estremecedoras, como los múltiples asesinatos de niños inocentes a manos de los alzados, que son narrados en el libro con toda la crudeza con que fueron cometidos.
La intervención de Suárez constituyó un recuento histórico de los sucesos referidos, en el cual subrayó que aunque ciertamente en el Escambray la LCB tuvo que emplear más recursos, donde más años duró la lucha, hubo más de cien asesinatos de campesinos y cayeron cerca de 500 combatientes, hubo alzamientos y acciones terroristas en todo el territorio cubano, pero nunca, ni las bandas más numerosas, como la de Osvaldo Ramírez que llegó a tener 300 hombres, pudieron asentarse en un lugar y declararlo como aspiraban “Territorio libre del Comunismo”, tal y como explica el texto.
Hacia el final de su exposición el autor declaró «Fue una etapa dura, en la que, no sé si por chovinismo, puedo decir que salvamos la Revolución; esta atapa está explicada en el libro con todos los detalles. Es el aporte que hemos hecho, sin ser escritores, sin ser periodistas, pero los que tuvimos la oportunidad de participar de aquellos acontecimientos tenemos la responsabilidad de tratar de escribirlos para que las nuevas generaciones sepan por qué tenemos esto hoy en día, y que esto costó muchas vidas y muchos recursos».
(Tomado de Cubarte)